Yo no sé si esta será la auténtica receta del tiramisú italiano, aunque me haya basado en una receta que reza así, pero sí sé que estaba buenísimo. Si quereís saber de dónde he sacado la receta, pinchad aquí, sólo os digo que la receta es de Nicoletta Negrinni.
INGREDIENTES
- 250 gr de queso mascarpone.
- 3 huevos ( de los cuales usaremos las 3 yemas y sólo dos claras)
- 3 cucharadas de azúcar
- bizcochos italianos " sabojardi". Como no tenía en esta ocasión usé bizcochos al huevo
- 1 taza de café espreso
- brandy o licor de calidad
ELABORACION
Batimos las 2 claras de huevo con ayuda de unas varillas hasta dejarlas a punto de nieve. Reservamos.
Juntamos las yemas de los 3 huevos y el azúcar y batimos con varillas a mano hasta que blanqueen. Según la autora de la receta es importante que se bata a mano y no con varillas eléctricas.
Incorporamos el queso mascarpone ( en dos o tres veces) a la mezcla de yemas de huevo y azúcar. Poco a poco y con movimientos envolventes.
Por último añadir las claras montadas a punto de nieve también en dos o tres veces y con movimientos envolventes.
Se le puede añadir si se quiere en este momento una cucharadita de un brandy o un licor de calidad.
Preparamos un café de calidad y lo aromatizamos con otra cucharadita de brandy. Mojamos los bizcochos en esta mezcla por ambas partes y colocar los bizcochos con la parte del azúcar boca a bajo.
El montaje del postre es fácil.
Colocamos los bizcochos con la parte del azúcar hacia abajo en un molde rectangular. Cubrimos toda la superficie del molde. Añadimos la crema.
Volvemos a colocar otra capa de bizcochos mojados con el café-brandy y de nuevo cubrimos con la mezcla.
Dejamos enfriar en el frigorífico al menos durante 3 horas.
Justo en el momento en que vayamos a consumir el tiramisú, espolvoreamos con cacao en polvo sin azúcar.
He de decir, que este tiramísú duró en mi casa como unos 5 ó 6 días, no porque no gustara, sino porque como ya he dicho en alguna ocasión, mi familia no es nada golosa y aunque repartí más de las 3/4 partes de él, el otro cuarto que quedó me lo fui comiendo yo solita poco a poco. Bueno, lo que quería deciros es que conforme iban pasando los días, estaba INFINITAMENTE más rico porque los bizcochos se fueron empapando más y más y ganó en sabor.
Un saludo
Raquel
uuuummmm qué pinta más rica!!! Sería el postre pefecto para la comida que tengo hoy :)
ResponderEliminarbesos